LA CRIANZA DESCONOCIDA

Desde que me quedé embarazada y empecé a conocer todos estos temas de crianza con apego o crianza respetuosa sentí la necesidad de crear un blog pero ya había tantos, o eso me parecía, que pensé que no era necesario, sin embargo, hablando con mis amigas me di cuenta de que este no es un tema tan conocido como pensaba, todavía hace falta mucho esfuerzo para llegar a un gran número de familias pues pienso que cuantos más niños sean educados sin miedos, respetando sus necesidades naturales, con amor incondicional... el mundo será
cada vez un lugar mejor.

 En los últimos años se habla mucho en España de “crianza con apego”, “crianza con amor” o “crianza respetuosa”. Es una corriente que llega a nuestro país con años de retraso (muchos años)  y que se está desarrollando con éxito en otros países de mentalidad más abierta y flexible que la sociedad española. Aquí por supuesto hay polémica con respecto a los derechos y necesidades reales de los niños. Se confunde este tipo de crianza, que más que una  teoría es un estilo de vida, con un consentimiento total de los deseos del niño o un sometimiento de los padres frente a la “tiranía” de los pequeños. “Así le estás malcriando” o “te toma el pelo” son de las cosas más comunes que escucha una familia que ha decidido optar por  este tipo de crianza.

La crianza consciente o la Teoría del Apego  no es nada nuevo (Bowlby desarrolló su teoría a mediados del siglo XX)Se trata de tomar conciencia de que el niño (y todas las personas) necesitan mucho amor, necesitan atención, cariño y respeto. Esta crianza es un regreso a una maternidad más natural, más intuitiva y comprensiva con las necesidades del bebe y de la madre. Respetar los tiempos y necesidades del niño sin supeditarlas a las de los adultos. No se trata de darle todo lo que quiera o dejarles hacer lo que les dé la gana, no vamos a dejarles meter los dedos en el enchufe o cenar chocolate cada día. Se trata de darle todo el AMOR que necesita. No se trata de cosas materiales sino de TIEMPO, mucho tiempo. No se trata de manipular al niño con regalos o cariño condicionado a una actitud (si te portas bien, te haré caso) sino de AMOR INCONDICIONAL (aunque te portes mal, te quiero).  Se trata de estar ahí cuando nuestros hijos nos necesitan. Participar de su juego, de sus risas y también, mucho más, de acompañarlos en sus miedos, lloros o frustraciones.

Te recomiendo la lectura del libro Los vínculos afectivos de Jhon Bowlby que reúne una selección de sus conferencias más representativas y aporta una idea general de esta línea de pensamiento.